Por lo tanto es un mútuo reconocimiento, el que tengamos que estar ambos agradecidos.
La primera parte de la etapa de hoy, es creemos que la más fea de todo el Camino de Santiago. Discurre todo el rato por el lado de la carretera, incluso en algunos tramos tenemos que cruzarla con el peligro que ello conlleva y algunos ratos tenemos que circular por ella.
LEÓN - RABANAL DEL CAMINO
Después de dormir como reyes y nunca mejor dicho porque el Parador de León es como si en un castillo te encontraras, nos ponemos manos a la obra y rumbo a Rabanal del Camino.
Llegados a Órbigo, cruzamos por un Puente Romano que cuando hicimos el Camino hace 3 años y también lo cruzamos, estaba en restauración. En la actualidad, es uno de los puentes más bonitos que hemos visto durante el Camino.
Pasado el puente llegamos a Hospital de Órbigo y llegamos a una bifurcación del Camino y cogemos el que nos indica que es favorable tanto para peregrinos de a pie, como de bicicleta. Es una subida bastante larga y el problema no es la inclinación, sino el terreno que es bastante pedregoso y maniobrar con el tándem más en la bajada que en la subida, se hace bastante complicado.
Cuando llegamos a la cima nos encontramos con un chico que en el anterior camino ya nos lo encontramos, con un carro con todo tipo de alimentos, dulces, salados, fruta, etc... y todo completamente gratis y si quieres dejar un donativo lo dejas y si no Buen Camino. En nuestro caso le dejamos una ayuda.
Unos pocos kilómetros más adelante llegamos al Crucifijo de San Toribio, que justo detrás se divisa ya Astorga.
A la entrada de Astorga, nos encontramos con una escultura hecha en bronce que representa a un peregrino andando y es tremendamente espectacular, en lo que se refiere a sus dimensiones.
Como desde que hemos empezado el Camino de Santiago no ha habido día que no tuvieramos un incidente mecánico, éste no iba a ser menos y no es otro que la rotura de un radio de mi rueda trasera y varios radios completamente destensados.
Pregunto a un señor por una tienda de bicicletas y muy amablemente me indica correctamente. Llegados allí, no hay ningún problema de que me arreglen la rueda en un plis plas.
Cruzamos Astorga y nos encontramos con un edificio de Gaudi precioso.
Mientras nos arreglaban la rueda, Laura y Vigi ya se acercaron a la catedral de Astorga a que les puesieran el sello de rigor, a las credenciales. La catedral es espectacular y yo creo que es una de las más bonitas que hemos visto.
El objetivo de hoy así mismo, es desplazarnos un poco del Camino para llegar a Castrillo de los Polvazares, a comer el típico Cocido Maragato que la única peculiaridad a parte de estar tremendamente exquisito y de rechupete, es que primero te comes la carne del cocido, despues los garbanzos con la verduras y por último la sopa.
Con la panza llena a rebosar, decidimos dar una vuelta por el pueblo para estirar las piernas y para que el Cocido baje un poquito, ya que nos quedan "sólo" unos 12 kilometros, pero todos de subida, tendida pero al fin y al cabo subida.
Después del pequeño paseo, hala a coger el tándem y todo para arriba hasta Rabanal del Camino. Llegamos rápidos sorprendentemente y nos adentramos por su Calle Real para buscar el Hostal El Refugio donde pasaremos la noche de hoy. Es un pueblo encantador y como hemos dicho en la introducción, de fiestas.
Hoy damos por terminada la sexta etapa y ahora nos quedan dos etapas bastante importantes ya que mañana subimos a Foncebadon y la Cruz de Ferro y pasado mañana el temido O'Cebreiro. Pero eso lo dejaremos para mañana. Un beso !!!!!!
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